Nas anteriores entradas temos visto como xa no mes de xuño activábase o mecanismo de solidariedade da clase traballadora organizada fronte aos sucesos acaecidos na Coruña os días 30 e 31 de maio de 1901, e como ao longo do mes de xullo o chamamento dos traballadores coruñeses, publicado polo Suplemento a la Revista Blanca a principios dese mes, espallábase polo estado español e polo mundo enteiro.
No exemplar de 27 de xullo de 1901, do Suplemento a la Revista Blanca continúa a campaña e mailas distintas informacións acerca do sucedido. Así, o primeiro dos contidos publicados nese exemplar, reproduce o texto da intervención de Soledad Gustavo (Teresa Mañé) no mitin de protesta celebrado en Madrid:
LOS SUCESOS DE LA CORUÑA
Amigos y compañeros
Salud.
Lo primero que debe hacerse cuando se trata de un acto de la naturaleza del que nos congrega, es convencer a los oyentes de la justicia que defendemos para recabar la cooperación moral y material en la obra que llevamos a término.
A este objeto, me he impuesto hoy la obligación de explicar los sucesos de la Coruña tal y como se desarrollaron, sin atenuaciones de ninguna clase, que no son necesarias, y sin pretender ganar la voluntad del pueblo con razonamientos capciosos.
He ahí los hechos:
El 29 del pasado mes de Mayo se declararon en huelga los dependientes, cabos, aforadores y volantes del resguardo de consumos, por no haber accedido la empresa a una reclamación que le habían presentado. En la misma noche, los huelguistas recorrieron el recinto invitando a los pocos traidores a seguirles, lo que les dió buen resultado. Al dia siguiente por la tarde, acompañados de un grupo de trabajadores de distintos oficios que se les incorporaron y un buen número de mujeres y niños, hicieron nuevo recorrido por el distrito, a fin de pedir a los esquirols que secundaran la huelga; pero al llegar al fielato llamado de Caballeros, la guardia civil les impidió el paso. Ante esta interrupción y tratándose de la guardia civil, tan justamente desacreditada, los del grupo silbaron y algunos niños arrojaron piedras a la fuerza, y ésta sin hacer las señales de ordenanza ni haberse decretado el estado de guerra, descargó sus maüsers contra la multitud indefensa, destrozando el cráneo de un hombre e hiriendo a una porción de mujeres y niños.
Tan salvaje acometida llegó al corazón de las masas y para protestar de ella y demostrar que la miseria y la vejación no lograron extinguir en el pueblo los sentimientos altruistas y de solidaridad, los trabajadores, unánimemente, se declararon por tres días en huelga general.
Cerrados los talleres, paralizado el comercio completamente, pues ni siquiera se descargaron los equipajes de los buques llegados a aquel puerto, el gobernador, viéndose impotente ante la solidaridad demostrada tan hermosa y virimente por el trabajador coruñés, al medio del día 31 mandó llamar a todos los presidentes de las sociedades obreras pidiendo se le prometiera circunscribir el paro general en un solo día, y no pudiéndolo lograr, indicó a los presidentes resignaría el mando, cosa que hizo a las pocas horas.
Por la tarde de este mismo día, fueron los obreros a rendir el último tributo de simpatía a la desgraciada víctima de la barbarie de la noche anterior. En numerosa manifestación, que no bajaría de 8000 personas, acompañaron el cadáver al cementerio, recorriendo las principales calles de la ciudad, sin que el menor tropiezo fuese a turbar la tristeza de los manifestantes. Pero apenas habían regresado, y estando las calles atestadas de gente, fíjanse los bandos declarando la ley marcial, y acto contínuo, sin aguardar el tiempo prefijado por la ley, comienza la caballería a dar cargas a la multitud y la guardia civil a hacer descargas cerradas con los maüsers, causando la muerte y el espanto por doquiera, hasta el punto de que ni las camillas ni los médicos del hospital daban a basto a transportar y curar a tantos heridos. Hasta en los balcones de las casas hubo muertos y heridos, entre ellos señoras y particulares que desde allí presenciaban la horrible carnicería. Los obreros, claro está, defendieron sus vidas como pudieron, ya que se veían acorralados como obejas por lobos hambrientos de carne. El pueblo, no obstante estar desarmado, porque el que más tenía un mal revólver, y aún éstos eran pocos, resistía valerosamente como debieron hacerlo sus antepasados con las legiones romanas que fueron a conquistarlas y someterlas por la fuerza, y en esta lucha se sostuvo algunas horas, hasta que bien entrada la noche se fue disolviendo rendido y maltrecho de tan desigual batalla.
El paro general continuó los tres días prefijados por los obreros como firme protesta de los sangrientos atropellos del día 30 y de la vandálica agresión del 31.
Durante este interregno fueron llamados a presencia del capitán general los presidentes de las sociedades obreras, a fin de que cesara el estado anormal de la capital gallega. Como era acuerdo tácito de las masas volver el lunes al trabajo, y a fin de evitar nuevo derramamiento de sangre, prometieron aquéllos normalizar la vida para dicho día, a cambio de la libertad de los presos y el cese de la matanza.
Prometiolo el general; pero tan pronto se normalizó la vida del todo, empezaron las detenciones, se multiplicaron los procesos, funcionaron los consejos de guerra, se echaron obreros al presidio, se violó el derecho de gentes y se vió incumplida la palabra empeñada por un caballero español, hijo y autoridad de esta tierra, que, según cantaron los poetas, es la tierra de la hidalguía y la lealtad.
Sentenciados algunos infelices obreros a veinte y doce años de presidido, próximos a ser condenados una porción más, se ha dado el caso de que el fiscal, y por lo regular nunca son generosos esos señores, haya pedido la pena de doce años para el profesor laico Cebrián, condena basada, según los informes del consejo de guerra publicados por la prensa burguesa de la Coruña, en que a los civiles, testigos en el consejo de guerra, les pareció que un hombre vestido como el procesado, les hacía fuego desde las ventanas del Centro Obrero.
Y a pesar de esta incalificable condena, no quedó satisfecho el señor de horca y cuchillo de la Coruña, que no aprobó la sentencia por parecerle benigna y fue a parar al Supremo de Guerra y Marina, donde actualmente está.
No termina aquí toda la arbitrariedad y el ensañamiento de las autoridades de la capital gallega. Estos últimos días, cuatro carpinteros que fueron citados como testigos de descargo, quedaron presos, y el obrero Felipe Salvador Piñeiro, por el mero hecho de haber sido antes de los sucesos, no mientras se desarrollaron, presidente de la sociedad de pintores, está también preso.
Y ya en la pendiente de la arbitrariedad y la injusticia, los jueces han decretado la detención de obreros acusados de haber promovido desórdenes en huelgas desarrolladas desde el año 87, y han pedido la relación de familias que mandaban los hijos a la escuela laica; si bien esto último nada tiene de extraño, si se tiene en cuenta que el capitán general tiene por ayudantes a dos socios protectores de los colegios católicos de la localidad.
Ahora bien; se envía a presidio a los obreros de quienes se sospecha que hicieron frente a la guardia civil; ¿qué hubiérais hecho vosotros en lugar da las víctimas? ¿qué hubieran hecho los mismos jueces? Defender sus vidas como hubieran podido. Haciendo lo contrario, dejándose matar sin protestar, es como merecerían castigo por cobardes, por incapaces de defender, no ya su dignidad, sino su existencia. Si alguien ha de ir a presidio, no ha de ser la víctima que se defiende como puede de las agresiones inmotivadas e inesperadas de un enemigo armado hasta los dientes, sino este enemigo que, convendido de que su víctima no ha de defender más que con piedras o revólveres inofensivos, se ensaña con la crueldad acreditada en la guardia civil.
Para esta obra, para la obra de sacar del presidio a los que se defendieron como pudieron de una fuerza que les ametrallaba sin piedad, se pide vuestro concurso.
Y en este empeño justiciero, que está por encima de todos los partidos, porque es una obra de humanidad, la menos indicada para hacerlo, el más humilde de los presentes suplica, así a los oradores que me han de seguir en el uso de la palabra, como a los oyentes, que depongan sus particulares ideas y que aquí y en todas partes donde se defienda la misma causa, se consideren, antes que republicanos, antes que socialistas, antes que anarquistas, abogados de las pobres víctimas de la Coruña.
Soledad G.
Nos números publicados dende xuño de 1901 polo Suplemento a La Revista Blanca, irán insertándose informacións que permiten coñecer a ampla difusión e eco internacional do chamamento á solidariedade obreira. Así, no exemplar de 27 de xullo de 1901, publícase a seguinte nota:
SOLIDARIDAD OBRERA INTERNACIONAL
El trabajador del mundo va aunando sus fuerzas en una acción común contra todas las arbitrariedades gubernamentales. Ensayadas las fuerzas proletarias con motivo del proceso de Montjuich, al reproducirse las injusticias con los sucesos de la Coruña, las fuerzas obreras se mueven con mayor soltura, rapidez y decisión que entonces.
La costumbre del combate social a que nos somete la burguesía, ejercita nuestras facultades para la lucha. Prueba de estas palabras son los mitins que se celebraron el domingo pasado y que vamos a reseñar ligeramente para poder atender a la propaganda de nuestro ideal y a la solidaridad obrera a un mismo tiempo.
MITIN EN MADRID
En el de Madrid tomaron parte: Soledad Gustavo, cuyas palabras sirven de entrada en este número; Duque, delegado de los obreros de la Coruña; Lorenzo Bermejo, de la sociedad de albañiles El Porvenir del trabajo; Cordovés, de la sociedad de sastres; Corona, de la Juventud republicana; Solana de los constructores de calzado, Salmerón y García, de la sociedad El Librepensamiento; Eusebio Gutiérrez, de la sociedad de cerrajeros mecánicos; Emilio Rodríguez, de la Comisión permanente; González, de la Acción democrática; Lerroux; Ricardo Rodríguez; Enrique Borrel y el presidente Jerónimo Palma. El conjunto de los discursos fue de anatema contra la guardia civil, contra los gobiernos que amparan las atrocidades de aquélla comete por amor al principio de autoridad, y, en general, contra el principio de la propiedad y de la autoridad, que es la causa de los abusos y crímenes que se deploran.
Al mitin estaban adheridos: Albañiles, El provenir del trabajo.- Sastres, La razón del obrero.- Obreros del ferrocarril, La Locomotora invencible.- Ebanistas y silleros.- El Librepensamiento.- Zapateros, La Botina de Oro.- Centro Federal.- Juventud republicana.- Acción democrática.- Cerrajeros mecánicos.- Sección Varia, La aurora del provenir.- Grupo Sociología.- Grupo Los Rebeldes.- Sociedad de revocadores y Sociedad de pintores y decoradores.
Las dos subcomisiones en que estaba dividida la Comisión permanente hasta recabar la libertad de los obreros de la Coruña, presentaron sus conclusiones por separado, obedeciendo a las dos tendencias a que responden las subcomisiones referidas. La legal y la política eleva una petición a los poderes públicos; la de agitación popular, se dirige al pueblo en estos términos:
AL PUEBLO
El mitin de protesta celebrado en el teatro Barbieri, de Madrid, el día 21 de Julio de 1901, contra los atropellos cometidos por la fuerza en la Coruña, organizado por la Comisión permanente en representación de varias entidades de diferentes tendencias políticas, sociales y societarias, considera: Que los obreros de la Coruña no habían dado motivo para que se les ametrallara; que las condenas que pesan sobre ellos y las que puedan acordarse son injustas de toda injusticia, y considerando, que los gobiernos no hacen más que apoyar las demasías de la fuerza con el pretexto del prestigio del principio de autoridad, los reunidos se dirigen al pueblo español para aconsejarle que no fíe la práctica ni el establecimiento de la justicia más que a su propio esfuerzo y en su propia voluntad, y que no cese en esta actitud de protesta hasta que los obreros de la Coruña sean objeto de aquella justicia.
El mitin acordó ambas conclusiones, y la Comisión permanente les ha dado curso, enviando la una al representante del poder y la otra a las sociedades obreras y radicales de España, para que la tengan en cuenta y hagan si quieren lo que en ella se les indica.
Al mitin, enorme concurrencia y gran entusiasmo.
Al objeto de ganar tiempo y espacio, y considerando que no podemos esperar que nuestros compañeros nos envíen las reseñas de los mitins que se han celebrado en provincias, las tomamos de la prensa de gran circulación, sin perjuicio de publicar los escritos de nuestros corresponsales en la sección de “Movimiento Social”, si llegan a tiempo.
MITIN EN CADIZ
Asistieron representaciones de Sevilla, Jerez, Lebrija, San Fernando, Puerto de Santa María y otros puntos que la prensa no menciona. La concurrencia llenaba el espacioso local por completo. Presidió el presidente de la sociedad de tipógrafos, Alfredo Permaní. Hablaron diez y ocho obreros, según La Correspondencia de España, que es el periódico de Madrid que da detalles más extensos del referido mitin. El mentado diario cita a los siguientes oradores:
Rioja, sin más detalles; Juan Herrera, zapatero de Cádiz; Marchante, albañil de San Fernando; Fernández, sin más detalles; Aguilera, profesor de la escuela de Comercio; Antonio Ojeda, de hierro y metales, de Sevilla, y Francisco J. Sola, de Sevilla.
Todos los oradores combatieron a la actual sociedad, que por la base que le informa no puede prevenir, antes al contrario, fomenta los crímenes de la fuerza como los de la Coruña, Sevilla y Barcelona.
Estaban adheridos al mitin: Por la sociedad de carpinteros, Manuel Iglesias.- Por la de fogoneros, Emilio Escariz.- Por la de tipógrafos, J. Torres.- Por la de hierro y metales, Francisco Lozano.- Por la de albañiles, José Galeano.- Por la de pintores, José Cachón.- Por la de panaderos, Agustín Nande.- Por la de estibadores, Emilio Sampallo.- Por la de modelistas y fundidores, Juan Cabaña.
MITIN EN BARCELONA
Enorme concurrencia. Presidió Sebastián Suñé. Hablaron los compañeros Bosch, Lleonart, Torner, Balsells, Bonafulla, Montenegro y otros que la prensa no menciona.
Esperamos que la reseña de este mitin, que indudablemente nos enviará nuestro corresponsal, llegará con tiempo para ser publicada en “Movimiento social”. Sobre este asunto leemos en un diario burgués:
Barcelona 21 (10,30 m.).
Anoche se reunieron los delegados de más de cuarenta sociedades obreras, en asamblea, para tratar de la conducta que debe observarse ante la persistencia de las detenciones en la Coruña.
El gobernador, señor Larroca, tuvo, por una confidencia, conocimiento de la reunión, y envió un delegado, quien nada pudo traslucir, porque la asamblea se celebró después de marcharse dicho delegado.
Parece que entre éste y un individuo que se hallaba en el local se suscitó un altercado acerca de si un golpe que recibió el primero fue casual o intencionado.
En la asamblea se propuso la huelga general, no prosperando la idea por el momento y aplazándola hasta que los obreros se convenzan de que es imposible conseguir la libertad de los presos de la Coruña.
Quedó constituida una Junta permanente para que esté a la expectativa de la solución del gobierno en el asunto, a fin de obrar en consecuencia.- Reig.”
Sospechamos que estas oficiosidades costarán caras a algún compañero nuestro de la capital catalana, que de buena fe o por darle pisto se confiesa con un redactor de La Publicidad y corresponsal del Heraldo, que demuestra ser lo que los catalanes dicen un olla.
MITIN DE OVIEDO
De El Imparcial
Oviedo 21 (2 tarde).
Esta mañana se ha verificado el mitin de protesta contra los atropellos últimamente cometidos en la Coruña.
Han asistido representantes de varias agrupaciones obreras y no pocos libertarios y librepensadores de esta localidad.
Los discursos todos se han reducido a invectivas contra el gobierno, el gobernador de la Coruña y la guardia civil.
Varios de los oradores han hecho extensiva su indignación a los socialistas, que no han querido asistir al mitin si no se celebraba en condiciones, según los increpadores, inadmisibles.
El acto terminó abriéndose una suscripción a favor de los presos de la Coruña.- El Corresponsal.
Téngase en cuenta que el corresponsal de El Imparcial en Oviedo es gran amigo de Vigil, redactor como éste de Revista Popular y de la Aurora Social, de la que Vigil es director, y exseminarista.
MITIN EN LA LINEA
La Línea 21 (8,45 n.).
Acaba ahora el mitin celebrado en la plaza de toros y organizado por el Centro obrero, como acto de protesta por los atropellos llevados a cabo en La Coruña y en Lebrija. Hablaron muchos obreros, condenando los sucesos y encomiando la solidaridad.
Se leyeron telegramas de adhesión de Londres.
Se acordó redactar una protesta y hacer una colecta a beneficio de las familias de las víctimas; la colecta ascendió a 200 pesetas.
Asistieron unas 3000 personas.
El orden ha sido completo.- El corresponsal.
Sabemos que se han celebrado otros mitins en distintas localidades, como, por ejemplo, en Tarrasa, Granada, Nerva y San Roque, pero de dichos actos no tenemos noticia. En todos se ha recaudado dinero para las víctimas de La Coruña.
DESDE LA CORUÑA
Habíamos quedado en que las sociedades de resistencia estaban disueltas porque así lo había manifestado el juez militar a los presidentes cuando les leyó el auto judicial. Precisamente porque el auto no mentaba la disolución, y sólo confirmaba la suspensión, fue preguntado el citado juez y contestó, categóricamente, que la confirmación judicial de la suspensión gubernativa dentro del plazo de veinte días que la ley señala, equivalía a la disolución. Pero no es así; según el abogado que en representación de las sociedades y los presidentes entabló la competencia de jurisdicción, no hay tal disolución; tanto es así, que si fuese resuelta la competencia en sentido favorable, esto es, que se inhibiese el Juzgado ordinario de las causas, las sociedades volverían inmediatamente a entrar en ejercicio de sus funciones, aún cuando las causas que a ellas y sus presidentes se siguen continuasen su curso, que probablemente se sobreseerían. ¡Y vaya un golpe que sería el continuar en pie las sociedades!
Ahora bien; siendo como fue la suspensión gubernativa orden del capitán general, y la confirmación judicial de la misma autoridad emanada -porque eso sí, como sus facultades son discrecionales, lo mismo ejerce de gobernador como de juez- cabe suponer que el juez militar que notificó lo de la disolución lo hizo con la intención de que, dándola como hecha, nada se hiciera en sentido que contrariase sus resoluciones. En esto se han llevado chasco.
Hoy fue llamado a declarar por primera vez un individuo del resguardo de Consumos que está preso desde el 14 del mes pasado. Quiere decirse que estuvo preso treinta y siete días sin prestar declaración ni declarársele procesado ni nada, y eso que está incluído en el proceso de los 48, y cuyo sumario está a consulta del auditor de guerra. Ahora, por esta muestra, podrá cualquiera formar juicio del desbarajuste de estos procesos y del derroche de arbitrariedades cometidas.
Hace pocos días se hizo el primer reparto de dinero entre los presos y viudas, a prorrateo de días de prisión. Repartiéronse 442,95 pesetas en dos mil novecientos cincuenta y tres días y 91 individuos, correspondiendo a 0.15 pesetas por día. Procedía el dinero de suscripciones hechas por el Casino Republicano, La Emancipación y recibidas en El Noroeste.
Agregando a estos 91 individuos tres que renunciaron y descontándose 12 viudas y de los que están en libertad provisional, resultan aún ochenta y dos presos por los sucesos el 30 y 31 de Mayo.
Y no hay necesidad de comentarios, que de suyo se hacen.
Mal efecto, muy malo, causó la reseña que de los dos mitins celebrados en el Liceo de Ríos de esa, organizos por el partido socialista y Centro de Sociedades obreras de la calle Relatores hizo la prensa burguesa. Eso no fue más que inculpar a los trabajadores coruñeses aparentando defenderlos. Está dicho y repetido hasta la saciedad, que aquí no hubo violencia alguna, ni siquiera alteración del orden público, y ellos dale con las huelgas violentas, y vuelta con ellas, y machaca y más machaca con lo mismo, dando con esto por sentado que aquí usamos la violencia y hemos merecido el ataque de la guardia civil, siendo así que fuimos atacados mientras discurríamos pacíficamente, y el que más contestó como pudo, pero siempre fue después de atacado.
Hasta para la propaganda misma de su partido les ha hecho disfavor, pues todo el mundo ve la intención dañina con que proceden quienes hablan de ese modo. Aunque hubiera sido verdad lo que dan por hecho, no deberían decirlo en esta ocasión; siempre podría tachárseles de indiscretos o mal intencionados; ahora, non habiéndolo sido, como no lo fue, ¿qué calificativo merecen?
El 17 fueron puestos en libertad provisional dos presos, pescadores de profesión, que por negarse a pagar derechos de consumo de unos pescados no sujetos al adeudo, intervino la guardia civil, y prisión al canto. Llevaban más de un mes presos y se les instruyó proceso, que estaba ya concluído y a punto de verse en consejo de guerra, pero que se conoce vieron a tiempo la injusticia.
Pasado mañana se celebrará el consejo de guerra para ver y fallar la causa que se sigue al obrero Juan Bello por coacción. Se le acusa de haberla ejercido con una mujer del campo que conducía leche para la ciudad, que, según noticias particulares, no hubo tal; pero como en estos tiempos cualquier cosa la califican de coacción, no extraña ya a nadie que una simple conversación merezca tal calificativo.
Por noticias particulares enviadas de esa a principios de semana, asegurábase que en el consejo de ministros celebrado el jueves se acordaría el levantamiento del estado de guerra que padecemos ya cerca de dos meses, pero no hubo de qué. A pesar de todas las seguridades y todas las promesas, como si no.
Esto parece ya un escarnio. Si de los mitins que hoy se celebran en Madrid, Barcelona, Cádiz, Gijón, Oviedo y otros puntos no sale algo práctico, algo que obligue al gobierno a resolver un conflicto para no crear otro, lo que es a vía legal ya se ve que no hacen caso, pues, como tuvimos ocasión de observar, se han tocado todos los resortes de la persuasión pacífica y razonada sin resultado alguno. Y a propósito de los mitins, ayer se han depositado en la Central de Telégrafos cuatro despachos iguales dirigidos al Sr. Pí y Margall, de Madrid; El Productor, de Barcelona; El Progreso de Asturias, de Oviedo; y La Defensa del Obrero, de Gijón, con el siguiente texto: “Obreros coruñeses saludan y agradecen ese pueblo congregado en mitin protesta.”-Comisión. A Cádiz no se envió igual telegrama por no tenerse a tiempo hábil noticia del mitin que allí se celebra hoy.
Siguen con creciente interés y viva satisfacción los trabajadores y la parte sana del pueblo la campaña que el Suplemento a la Revista Blanca emprendió y sostiene sobre los sucesos de ésta desarrollados, y para él son sus cariñosas muestras de agradecimiento y simpatía.
Corresponsal.
21 Julio 1901
Como temos visto en entradas anteriores, e na propia nota do corresponsal do Suplemento a La Revista Blanca, a vergoñenta posición dos socialistas coruñeses, extendida polo seu partido ao moitos outros lugares, poñía trabas ao exercicio da solidariedade cara os traballadores coruñeses represaliados. Claramente o afirma o redactor do Suplemento, no seu exemplar de 27 de xullo de 1901:
Sí, lo afirmamos y lo ratificamos: los jefes socialistas van contra los obreros de la Coruña. Las cartas que publica El Socialista de la capital gallega lo demuestran. Lo demuestra también el hecho de haber abandonado la defensa de aquellos obreros que se vieron ametrallados, ocupándose sólo en censurar á los anarquistas, mientras la justicia histórica manda á presidio á los productores.
Para nosotros los obreros todos, antes que anarquistas, antes que socialistas, son explotados, y cuando el pobre tiene razón, no nos entretenemos en regatearle nuestro apoyo. Ningún anarquista había preso en la Coruña y ya contaban con nuestra defensa los obreros de aquella capital; hoy, de cien presos, sólo cinco ó seis son libertarios; entre aquéllos hay un socialista, abundan mucho más los republicanos; la mayoría no militan en ningún partido; pero habrían de quedar presos los afiliados al partido obrero únicamente, y nuestra defensa seria tan calurosa y constante como lo es ahora.
Los jefes socialistas no reparan en abandonar la causa de cien obreros que tienen razón, que se vieron asesinados como perros rabiosos, que merecían el presidio si no se hubiesen defendido como pudieron, con tal de poder reventar á unos cuantos anarquistas y poderles quitar la fuerza de que disponen entre el pueblo.
Se duelen los jefes socialistas de que les digamos que van contra los obreros coruñeses. ¿Qué han hecho en su defensa? Nada; al contrario, han encontrado atenuaciones en las atrocidades de la fuerza, en el hecho de haberse declarado los obreros en huelga general en señal de protesta contra otras atrocidades cometidas por la siempre valiente y heroica guardia civil.
La manera hipócrita con que á última hora los jefes socialistas defienden á los obreros coruñeses, arrastrados por la agitación popular, más les perjudica que les beneficia, porque protestar de las predicaciones anarquistas que llevan al presidio á los obreros, y decir que los hechos ocurridos en la Coruña es obra de estas predicaciones, equivale á censurar á los obreros coruñeses y á aprobar el rigor de las autoridades.
La carta del policía Rodríguez, dando detalles de la buena disposición en que se encontraban las sociedades obreras de la Coruña, para la declaración de las huelgas generales, fué publicada después de la clausura de las sociedades obreras, pero no después de las detenciones y procesamientos de sus presidentes.
Por lo tanto, los que acusan al corresponsal de El Socialista de ser la causa de aquellas detenciones, no lo hacen á humo de pajas.
Y la misma táctica que usan ahora en la Coruña, y que antes habían usado en Gijón, ponen en práctica en la Cuenca del Ter. A consecuencia de los hechos desarrollados en Marzo, se están realizando detenciones en la comarca de aquel río. Todo el mundo sabe la injusticia con que los obreros fueron tratados por sus burgueses. ¡Hasta Sagasta, hasta Sagasta, obreros, encontró atenuante en los actos de los trabajadores del Ter, “que no habían de morirse de hambre porque así les pluguiese á los fabricantes!” El mismo gobernador de Barcelona y el ministro de la Gobernación amenazaron á los burgueses con retirar la fuerza si no abrían las fábricas.
Pues ahora, ante las detenciones de obreros que se están realizando en aquella comarca catalana, los jefes socialistas, en lugar de protestar de ellas, censuran á los anarquistas, porque por su culpa se llevan á cabo aquellas detenciones, no por culpa de unos jueces al servicio del capital. Así son todos de ruines y miserables.
Antes que dar la razón á los anarquistas, se la dan á la burguesía y á las autoridades, aunque peligre la libertad de cientos de obreros, ¿Cómo con estas miserias pueden obtener la simpatía del pueblo, del obrero, siempre generoso?
¡Moño!, los obreros de la Cuenca del Ter habían de dejarse morir de hambre, habían de abandonar á su suerte á sus compañeros, victimas de la burguesía, habían de ver impávidos cómo eran suplantados los hombres por mujeres, cómo la miseria invadía sus hogares, cómo los patronos se burlaban de la asociación y cómo se hacían blanco de las iras patronales á los obreros más activos.
Esto habían de hacer los obreros de la cuenca del Ter y no rebelarse contra tanta maldad e injusticia, y porque no lo hicieron, se les abandona también, se les dice: haced caso de los anarquistas, que mientras no seáis dóciles y sumisos borregos, como nosotros os queremos, no obtendréis nuestro apoyo; antes hallaremos bien lo que hagan las autoridades contra vosotros, por arbitrario y criminal que sea. He aquí por qué lo primero que se les ocurre, cuando los jueces y las justicias y los gandules encasacados atropellan a los obreros, es echarles en cara su rebeldía, es censurar a los anarquistas; no oponerse a los desmanes del poder, y mucho menos llamar a la defensa común a las huestes proletarias.
Pero así, serviles, si llegáis a ser pastores de un pequeño rebaño, no seréis nunca apóstoles de una causa santa, y noble.
Baixo o título “Movimiento Social”, o Suplemento recolle novas breves sobre o que acontecía en diferentes localidades tanto no estado español como a nivel internacional. No seu número de 27 de xullo de 1901, atopamos varios contidos ao respecto, pero salientamos en primeiro lugar a resposta solidaria dos traballadores de Lebrija, en Sevilla, que foran asímesmo vítimas da represión sobre o movemento obreiro nesa época:
Lebrija.— Compañeros de La Revista Blanca.
Salud.
Hemos de participaros que en ésta pensamos celebrar un mitin de protesta contra los atropellos cometidos por la guardia civil en Barcelona, Coruña y Lebrija.
Para dicho objeto tenemos abierta una suscripción voluntaria. Si otras localidades desean ayudarnos con su adhesión, se celebraría más pronto, porque los que aquí hemos tomado la íniciatíva, somos los que de menos medios podemos disponer, á consecuencia de no haber trabajado en todo este verano por causa de patronos y autoridades.
Todas las localidades ó individuos y sociedades que deseen adherirse, pueden escribir á la dirección siguiente: Calle de Ocón, núm. 1, á nombre de Antonio Magriz.
Nuestro propósito es, si se recauda dinero suficiente, invitar á Teresa Claramunt y José López Montenegro. Ahora todo depende de la voluntad y buena fe de los trabajadores andaluces.
—El Centro obrero de esta localidad se encuentra cerrado desde el 22 de Junio; así lo mandó el alcalde de este pueblo. Los individuos que formábamos la junta directiva del Centro estamos procesados. El juez especial que vino para tomarnos declaración sobre la cuestión de la siega, así nos lo manifestó en Utrera en el pasado mes de Junio, pues allí fuimos mandados llamar para notificarnos que estábamos procesados por delitos imaginarios de coacción, coalición y… qué sé yo. Se nos pide por lo pronto el pago de una multa de l.OOO pesetas (¡atiza!), y después ignoro lo que nos pedirán: tal vez la cabeza.
Las mozas de servicio que cuando la venida á ésta de los portugueses dejaron sus faenas y marcharon á sus casas, si no estoy mal informado, también están procesadas.
Otras cuantas mujeres que acometieron á un esquirol sin hacerle daño, también están procesadas. En fin, el colmo.
—La huelga, si así puede llamársele, de los agricultores ha fracasado por completo. Casi todos los trabajadores han segado, como convenía á los burgueses, por cuenta ó á destajo.
Aquí, como en todas partes, ha habido traidores, y no en menor número, causantes de todo lo pasado.
¿Que quiénes son? Los morenistas, y entre ellos el célebre José Velázquez, presidente de la junta anterior del Centro.
Y basta por hoy.—Juan Cordero.
Lebrija Julio de 1901.
Barcelona
—El domingo pasado, por la mañana, celebramos un mitin de solidaridad y protesta contra las prisiones y atropellos de que son objetos nuestros hermanos de la Coruña.
El acto resultó muy importante, tomando parte en él buen número de sociedades obreras y varias colectividades de carácter radical que se adhirieron á nuestros propósitos.
Varios fueron los delegados que hablaron conciso y bien, entre ellos, el de los fundidores, tuvo frases muy enérgicas para los esbirros del tricornio. También dió una nota muy personal al mitin el delegado de cerrajeros mecánicos, diciendo que los obreros éramos las victimas de todos, incluso de la prensa, que tiene corresponsales tan poco decorosos que hinchan lo que se dice en los mitins, en perjuicio de la seriedad y de la honradez que debiera ser la norma de su hermosa misión. En un párrafo viril anatematizó á los que en todos los mitins peroran para lograr aplausos y que en cambio brillaban por su ausencia en el mitin obrero que se celebraba. Bonafulla dió la voz de alerta á los obreros. Dijo que las represalias de la Coruña y Sevilla no tardaríamos en verlas en la Cuenca del Ter, donde los fabricantes maquinan un complot para enviar unos cuantos proletarios á presidio. Pidió menos aplausos y más convicción, esperando nuevos mitins que vendrían á continuar la campaña de solidaridad emprendida.
Pero la nota del mitin la dió el martirizado Sebastián Suñé, quien con un lenguaje sobrio demostró la inutilidad de pedir nada á las autoridades, pues asi no se demuestra su necesidad. Dijo que es preciso que los obreros se capaciten de hacer con más práctica las huelgas, no batiéndose con los perros de la burguesia, guardia civil y policía, para que éstos hagan una matanza de obreros, sino yendo directamente al tronco, como hizo el malogrado Angiolillo. Cuando se posee la razón, dijo, se le dice al burgués: «Soy tu igual, tengo los mismos derechos que tu me usurpas, y más la razón; ó tú ó yo: escoge», y nos contó que en los calabozos de Montjuich un día se le presentó un jesuíta para hacerle comulgar con las enseñanzas de la religión católica, y que ni Marzo ni Portas, á pesar de los martirios, pudieron lograr nada de él, diciéndoles en cierta ocasión: «Haréis de mi cuerpo pedazos; pero no me arrancaréis ninguna declaración contra mis hermanos.» Todos deberíamos, exclama, ser decididos individualistas para defender lo que nos pertenece, y no necesitaríamos hacer actos de protesta á favor de otros explotados.
Fué muy alabada su argumentación.
Se leyeron las conclusiones del mitin condenando las atrocidades del gobierno, y en las cuales se dice queda nombrada una comisión permanente de delegados para promover agitación hasta que no cese el estado actual de cosas de la ciudad gallega.
Se recaudaron en las bandejas 143,80 pesetas.
El teatro-circo Barcelonés estuvo lleno durante el mitin, si bien no con tanta concurrencia como otras veces. No asistieron á sancionar la protesta ni se adhieren á ella las sociedades obreras mangoneadas por los socialistas y que tienen su domicilio en la calle de Amalia, núm. 3.
¡Vaya un concepto que tendrán de la solidaridad las aludidas sociedades obreras! ¡Y qué mezquinos son los jefes del microscópico partido socialista español!.- El corresponsal.
Valencia.- Los trabajos para la celebración del mitin de protesta se llevan á cabo con toda la prontitud posible, pues hasta ahora los propietarios nos niegan los locales, habiendo encontrado por fin un juego de pelota en que se ha determinado celebrarlo. No puedo decir el día; pero es fácil sea el próximo domingo.
—Los infusorios de ésta; han tirado una hoja, copia del órgano de la policía, la cual os remito por si no habéis tenido el mal gusto de leer el papel infusorio.
Pues cuando ésta ha salido, ya teníamos en prensa otra hoja titulada Los socialistas y los sucesos de la Coruña, la cual creo les hará rabiar un poco, al contrario de la suya, que nos ha hecho reir.—José Alarcón
Oviedo.- Compañeros de la Revista Blanca.
Salud,
En protesta de los bárbaros atropellos cometidos con los obreros coruñeses, hemos celebrado hoy domingo 21 un mitin iniciado por el Grupo Libre Pensador Luz, de esta ciudad, y secundado por el Grupo El Rebelde, a cuyo acto fueron invitados la Agrupación Socialistas y la Federación local, asistiendo a la segunda convocatoria, además de las entidades ya dichas, representaciones del Comité Regional del Partido socialista y de La Aurora Social, que nadie había ivitado y que son los mismos. En dicha reunión, la Federación local presentó las siguientes bases, sobre las cuales no admitieron discusión:
1ª.-El mitin, á la vez que de protesta contra las autoridades de la Coruña por los atropellos cometidos contra los trabajadores y Sociedades obreras, será para condenar la propaganda de ciertos obreros que arrastran ó aconsejan á los demás á la violencia para dar pretexto á las autoridades para nuevos atropellos ó justificar los que cometió.
2ª.-Del cumplimiento de la anterior base está encargado el presidente del mitin, que será elegido por la comisión organizadora, la cual procurará que los oradores no se aparten del óbjeto indicado.
3ª.-En caso de faltar algunos de los que hablen á lo estipulado en la primera base, si no fuera llamado al orden por el presidente ó éste no fuera obedecido, se retirarán los representantes dé la Federación local de Oviedo, y en caso de celebrarse el mitin en el domicilio de esta colectividad, será suspendido.
Para formar parte de la comisión organizadora, este Comité otorga su representación á los delegados Celestino González y Antonio S. Morán, que se atendrán á lo que dice esta comunicación.
Os desea Salud, Líbertad.
Por el comité de la Federación: por el presidente, el vice, Antonio Sánchez; el secretario, Bonifacio Martín.
Hay un sello que dice: Centro de Sociedades Obreras, Federación local, Oviedo.
Ya lo veis, trabajadores coruñeses, ya lo veis, obreros españoles. En esa gente puede más sus pasiones y sus odios, que el cariño por los presos de la burguesía y víctimas del actual régimen burgués. Eso no puede ser más mezquino. Inútil decir que las bases no fueron aceptadas, y que los embajadores de Vigil se retiraron.
En el mitin hicieron uso de la palabra Eladio Suárez y Oscar García, por el grupo librepensador; Higinio Labrador y Paulino Fernández, por el grupo El Rebelde; Ernesto Quirós, por el grupo de solidaridad de Gijón; Elias Fonseca, por el grupo de La Figuera; Marcelino Corujo, por el grupo libertario de Trubia, y Guillermo Fernández, por el grupo libertario de Gijón. Todos anatematizaron el proceder de las autoridades y el de los socialistas, por los odios de que están poseídos.
-El domingo por la mañana vinieron algunos labradores de las aldeas vecinas, preguntaron por el mitin y un socialista les contestó que no asistiesen a él sin que lo consultasen con Vigil. Ya puede suponerse lo que éste les dijo.
Se recaudaron 33 pesetas 25 céntimos para los presos de la Coruña.
Durante el acto recibimos un telegrama de los obreros de la Coruña, saludándonos y dándonos las gracias por la celebración del mitin.
-El otro día invitamos á Vigil á una controversia y nos contestó que no cree en la eficacia de la controversia, añadiendo á renglón seguido, que si hubiese de chocar con otro más fuerte que él rehuiría el choque, aceptándolo sólo en el caso de que comprendiere que el adversario era más débil.-Un obrero.
Gijón.- La sociedad de carpintero acordó en junta general dar un mitin e invitar para que tomen parte en él a Quejido y a Romeo.
Bien por los carpinteros.
El grupo de solidaridad internacional no pudo celebrar el anunciado mitin para protestar de los atropellos cometidos en la Coruña, por no tener dónde celebrarlo. Por todas partes nos quieren acorralar; pero sigan, sigan los burgueses en su táctica, que con esto aprenderán los trabajadores gijoneses á tomarlo por la fuerza.
Dichos y hechos
En el primer mitin celebrado en Madrid á favor de los obreros de la Coruña se recaudaron 22,60 pesetas; en el del domingo pasado 66,90 pesetas, y cinco de un compañero sombrerero, suman 93,40 pesetas, cuya cantidad ha sido entregada al delegado de la Coruña compañero Duque.

Mitins obreiros celebrados no estado español en xullo de 1901, en protestas polos sucesos do 30 e 31 de maio na Coruña

Suplemento a La Revista Blanca en Biblioteca Digital Memoria de Madrid – Hemeroteca digital









Deixar un comentario