A mediados do mes de agosto de 1901, a cidade continuaba en estado de guerra que será levantado coincidindo coa chegada do novo Gobernador Civil, como xa temos visto na entrada anterior: “Volta a normalidade? (I)“
Así recolle o xornal La Voz de Galicia as novas do levantamento do estado de sitio:
EL ESTADO DE GUERRA
Decíase ayer, como noticia cierta, que de hoy a mañana se levantará el estado de guerra en que se halla esta capital desde Mayo último.
Relacionábase esto con extensas referencias enviadas por el gobernador al ministro de la Gobernación dando cuenta de la actitud pacífica en que parecen hallarse, no sólo los elementos obreros, sino en general el vecindario todo.
De las impresiones transmitidas por el señor Soldevilla, se ocupó ayer el Gobierno en Consejo de Ministros.
Este acordó que el gobernador vuelva a hacerse cargo del mando.
Cuando es estado de sitio se levantes -que repetimos será de hoy a mañana- el Sr. Soldevilla irá a Madrid, a la vez que para recoger a su distinguida familia, para conferenciar de nuevo con el Sr. González.
Celebramos que cuanto antes se confirme la buena noticia indicada, y que vuelva La Coruña a entrar en la normalidad.
Dícese que hoy se reconcentrarán en esta ciudad las fuerzas de la Guardia civil de los nueve puestos más inmediatos a esta capital. (La Voz de Galicia, 18 de agosto de 1901)
EL LEVANTAMIENTO DEL ESTADO DE GUERRA
Con vista de los telegramas del Gobierno de que hemos dado cuenta en nuestro número anterior, se reunieron ayer mañana en el palacio de la Capitanía general, el Sr. Lachambre, el gobernador civil Sr. Soldevilla, y las demás autoridades.
La deliberación fue brevísima, casi pude decirse que no la hubo, y en el acto se mandaron a la imprenta los bandos que más adelante publicamos.
Hasta las cinco de la tarde no estuvieron en disposición de ser fijados en las esquinas.
El del Sr. Soldevilla ha producido excelente efecto.
Helos aquí:
D. José Lachambre y Domínguez, teniente general del Ejército y capitán general de Galicia, hago saber:
Que autorizado por el Gobierno de S.M. y de acuerdo con el consejo de autoridades, reunido al efecto, vengo en disponer:
Artículo 1º.- Queda levantado el estado de guerra establecido por mi bando de 31 de Mayo último en el partido judicial de esta ciudad.
Artículo 2º.- Como consecuencia del anterior precepto, las autoridades civiles y tribunales de justicia volverán a entender en los asuntos que con arreglo a las leyes les corresponden, y por lo tanto les serán remitidos o devueltos los procedimientos de que venía conociendo la jurisdicción de guerra por virtud del citado bando.
La Coruña, 18 de agosto de 1901
GOBIERNO DE LA PROVINCIA
Coruñeses:
Cumpliendo órdenes del Gobierno de Su Majestad, tengo la satisfacción grandísima de anunciaros que desde esta fecha queda levantado el estado de guerra en esta capital; que vuelven los ciudadanos a la normal vida del derecho común que a todos ampara y a todos comprende; vida de la cual fue, sin duda, preciso apartarse en días de tristísima recordación para La Coruña.
Mi satisfacción es tanto mayor, cuanto que -aparte de lo que a tan grato resultado haya podido contribuir- es este el primer acto público a que asocio mi nombre desde que me honro con el cargo de gobernador de esta provincia.
La moderación, el juicio y la cordura de que habéis dado pruebas durante este pasajero nublado de la ley civil, me hacen esperar con segura confianza que continuaréis mostrándoos dignos de la libertad que las leyes conceden, y que rindiendo cada cual con libertad completa culto a sus ideales, lo haréis, seguramente, siempre dentro de la ley.
La prudencia es el sostén más firme del derecho. Sed todos prudentes para que el derecho de cada uno sea respetado por todos los demás.
Para este fin me encontraréis siempre dispuesto a serviros, y todos, poderosos y humildes, menesterosos y potentados, siempre que pidáis dentro de la ley, hallaréis un amparador y un amigo en vuestro gobernador.
Fernando Soldevilla. La Coruña, 18 de agosto de 1901
El Sr. Soldevilla no cree, ni mucho menos, que ha terminado su misión en lo que se relaciona con el estado excepcional hasta ahora mantenido por La Coruña.
Continúa haciendo activas gestiones encaminadas al completo restablecimiento de la normalidad material y moral, anterior a los tristes sucesos de Mayo.
Bajo excelentes auspicios ha iniciado su mando y hacemos votos porque continúen favoreciéndole.
Ayer le visitó casi todo el Ayuntamiento con el alcalde a la cabeza.
El Sr. Fontenla dirigió al Sr. Soldevilla muy cariñosas y expresivas frases, a las cuales se mostró éste sumamente reconocido, añadiendo que en el Ayuntamiento de La Coruña no veía republicanos ni monárquicos, sino a concejales celosos del bien del pueblo. El se promete ser un concejal más, que hará lo posible para que La Coruña conserve siempre buen recuerdo de su gestión.
El Ayuntamiento salió muy complacido, después de prometer al gobernador su decidida cooperación para conservar el estado de paz y cordialidad que tanto se necesita.
No momento do levantamento do estado de sitio na cidade, temendo que poidera producirse algúnha reacción por parte dos obreiros, volven a reconcentrarse na cidade forzas da Garda civil doutros postos e liñas das localidades próximas.
Se han transmitido ayer las órdenes para la reconcentración de la Guardia civil en esta capital.
Vendrán los puestos de Carral, Carballo, Iñás, Corcubión y Ferrol.
Quizás vengan también fuerzas de Betanzos.
Las autoridades militares se ocupaban ayer en buscar alojamiento a estas fuerzas.
Se instalarán en el cuartel de Alfonoso XII. (La Voz de Galicia, 19 de agosto de 1901)
Inmediatamente despois de levantado o estado de guerra na cidade e mailo seu partido xudicial, o xornal coruñés La Voz de Galicia, no seu exemplar de 20 de agosto de 1901, publica xa algunhas novas que desminten o regreso á normalidade, como a situación de desemprego dos consumeiros folguistas e os esforzos dun movemento obreiro que, malia a represión sufrida, aínda ten forzas na cidade para apoiar a estes compañeiros, cunha comisión reclamando a súa readmisión ante as autoridades:
Anoche estuvo en la Alcaldía una Comisión de obreros a visitar al Sr. Fontenla.
Rogáronle que interceda con el arrendatario de consumos para que admita a todos aquellos ex-dependientes del resguardo que pudiesen tener cabida al servicio de aquella empresa.
El Sr. Fontenla dijo a los comisionados que procurando buscar un medio de vida a los ex-dependientes de consumos había hecho gestiones con el gobernador, en el sentido que la Comisión deseaba, y que continuaría haciéndolas con el Sr. Rebollo.
Dijo que caso que el arrendatario no accediese a tal pretensión, él procuraría darles trabajo abriendo obras municipales.
Hoy visitará la Comisión al Sr. Soldevilla para hacerle iguales ruegos.
Parece que el arrendatario cerca de quien se han hecho ya algunos trabajos, procurará cubrir las vacantes que ocurran con ex-dependientes, y enviará a Madrid algunos otros. (La Voz de Galicia, 20 de agosto de 1901)
LOS SUCESOS DE MAYO
Anoche conferenciaron extensamente el gobernador civil y el alcalde.
Parece que el objeto de la entrevista fue tratar de la excarcelación de los detenidos por los sucesos de Mayo
El gobernador dió cuenta al alcalde de telegramas del ministro de la Gobernación relativos al particular.
Probablemente conferenciará hoy el Sr. Soldevilla con el presidente y el fiscal de la Audiencia.
Tiene este asunto, a juzgar por las impresiones que nos fue posible recoger, un excelente cariz para los detenidos. (La Voz de Galicia, 21 de agosto de 1901)
Ayer mañana estuvieron en el Gobierno civil a visitar al Sr. Soldevilla, los obreros comisionados para gestionar que el arrendatario de consumos vuelva a admitir al servicio de dicha empresa a los consumeros declarados en huelga en Mayo último.
Expusieron al gobernador la precaria situación de dichos individuos, así como la de los obreros heridos durante los sucesos, y terminaron pidiéndole que rogase a su vez al arrendatario Sr. Rebollo, que admita a 30 o 40 de los ex-dependientes de consumos que están en libertad, teniéndoles presentes para ocupar las vacantes que a lo sucesivo ocurran a los que hoy están detenidos, y que de empleo en los servicios de la empresa a los obreros que en virtud de los sucesos de Mayo, quedaron inútiles para el trabajo.
El Sr. Soldevilla prometió llamar a su despacho al Sr. Rebollo y enterarle de los deseos de los obreros, a quienes recomendó que mientras se hacen las necesarias gestiones en tal sentido, procuren buscar cualquiera otra ocupación.
Después estuvieron en el despacho del gobernador, llamados por éste, los representantes del arriendo de consumos.
A excitaciones del Sr. Soldevilla prometieron que irán admitiendo, según ocurran vacantes, a los individuos del resguardo que perdieron recientemente su destino.
También trató de esto el Sr. Soldevilla con el alcalde. (La Voz de Galicia, 21 de agosto de 1901)
De novo, a presencia militar e policial increméntase na Coruña, o que indica ben ás claras o temor de protestas obreiras:
Con motivo de haberse levantado el estado de sitio, se dieron ayer las oportunas órdenes para que deje de prestar servicio la sección de retén que había en elos cuarteles. (La Voz de Galicia, 20 de agosto de 1901)
Con motivo de la concentración de fuerzas de la benemérita que se había ordenado para prevenir cualquier desmán que se realizase al levantar el estado de guerra, han llegado a La Coruña los individuos de la Guardia civil de los puestos de Puentedeume, Sigrás, Betanzos, Carral, Iñás, Curtis y Órdenes.
Es casi seguro que mañana regresen algunas de estas fuerzas a sus respectivos puestos a causa de la tranquilidad que reina en La Coruña. (La Voz de Galicia, 20 de agosto de 1901)
No mes de setembro de 1901, case un mes despois de levantado o estado de guerra e cando xa se agardaba a inminente posta en liberdade dalgúns dos presos, entre eles os presidentes das Sociedades obreiras coruñesas, aínda atopamos nas páxinas do xornal unha nova que volve a desmentir a suposta volta á normalidade:
Reunión suspendida
Anoche, a las nueve, tuvo conocimiento el gobernador civil de que en el local que ocupa la Sociedad y escuela de La Antorcha Galaica, sito en la calle del Socorro, núm.37, se estaba celebrando una reunión.
Inmediatamente envió allí al inspector de policía Sr. Pinet, con dos agentes, vestidos de paisano, con objeto de que suspendiesen el acto puesto que para efectuarlo no habían solicitado oportunamente autorización.
Al llegar al citado local el Sr. Pinet encontrose con treita y tantos individuos, todos obreros, los cuales le manifestaron se hallaban tratando de la constitución de una sociedad de socorros mútuos.
El mencionado inspector les comunicó la orden del gobernador.
Los congregados la acataron, y una comisión de ellos pasó a visitar al Sr. Soldevilla para rogarle les permitiese reunirse otro día.
El gobernador díjoles que lo solicitasen con las formalidades que previene la ley de Asociaciones, y que entonces enviaría a la reunión que se celebrase un delegado de su autoridad. (La Voz de Galicia, 12 de setembro de 1901)









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